Por Alberto Peralta
El miércoles 29 de setiembre, en Asunción, vivimos un ensayo del “jarabe” que los grupos de izquierda vienen aplicando en diversos países latinoamericanos, en la búsqueda de facilitar la “patria grande” soñada por el socialismo del siglo XXI. Espero que no pase, porque lo que se viene en caso contrario, es miseria y falta de libertad. Para tener una idea, basta con leer el escrito pergeñado por un hermano argentino, en el cual propone dividir ese hermoso país en dos, de un lado los que trabajan, y del otro los “progres”. No tiene desperdicio.
Llévense medio país.
La mitad que prefieran.
Nos da igual.
Nos quedamos con el 50% más pobre, no hay problema.
Y hagan la patria socialista.
Lleven a sindicalistas, punteros políticos, zurdos parásitos, empresarios prebendarios… Todos los que viven de nuestros impuestos juntitos puteando.
Les dejamos la mitad del país, la pampa húmeda lo que quieran.
Los 8 millones que aportamos nos vamos a la otra mitad.
Ustedes hagan una república comunitaria socialista. Y en 10 años vemos que país tiene menos pobreza
Les dejamos el CONICET, al Papa, a Grabois y a Lázaro Báez. Que los gobierne Milagro Sala con su justicia.
Nosotros nos llevamos a los fachos que se levantan de madrugada para trabajar y pagar impuestos.
Les dejamos que prohíban el glifosato, la minería, la siembra directa, prohíban los despidos y paguen 3 aguinaldos por año.
A la escuela de ustedes los niños pueden ir cuando quieran. Y profesor que aplaza a un niño por fumar en clase, lo mandan para nuestro lado. Pongan un baño unisex y que las chicas vayan mostrando las tetas, nos da igual.
En nuestras escuelas pedimos dedicación y premiamos a los mejores alumnos con becas en empresas. Y cumplen horarios, tantos los niños como los profesores.
Y docente que pide muchas licencias, se los mandamos a la patria socialista para que no sufra el infierno del capitalismo.
Lo que es innegociable para nosotros es la facultad de filosofía y letras, esa se la dejamos. Con todos los profes adentro para que sean felices.
Hagan la patria socialista, disfruten… Pero no nos pidan más que trabajemos por ustedes.